Así lo afirmó el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), y agregó que “está ubicada, claramente, en el firmamento nuclear internacional”.
El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi, afirmó este viernes que “la Argentina es el exportador nuclear del sur” y que “está ubicada, claramente, en el firmamento nuclear internacional” al concluir su visita oficial al país en el predio de Tecnópolis.
El diplomático argentino, quien desde fines de 2019 está al frente de la agencia de la ONU que trabaja por un uso pacífico y seguro de la tecnología nuclear, aseguró que “el mundo está en un momento muy interesante”, y remarcó que el problema de la crisis energética, sumado al calentamiento global, hacen de la energía nuclear un “camino virtuoso”.
En ese contexto global, Grossi indicó que “la Argentina es un país con 70 años de trayectoria en la materia y está ubicada claramente en el firmamento nuclear internacional”.
“No es un país dominante en la materia, pero es claramente presente. Y es un país que además tiene, siendo del hemisferio sur, un perfil bastante único, diferente”, sostuvo el funcionario en el cierre de la primera visita oficial a su país natal como jefe de la agencia nuclear de la ONU.
Y remarcó: “La verdad es que la Argentina es el exportador nuclear del sur. Es el país que está presente en muchos mercados y es el país también que, a través de proyectos como el Carem, hace de un reactor modular algo más que una presentación PowerPoint”.
Como un balance de su recorrida por el país, Grossi sostuvo que “después de tres años veo una Argentina que se está moviendo mucho en lo nuclear, pero también que faltan otras cosas”.
En ese sentido, precisó que los retos incluyen “una serie de factores, algunos que tienen que ver con lo puramente tecnológico, con lo financiero, y otros que tienen que ver con las decisiones del Gobierno nacional”.
Sobre el estado de las centrales nucleares nacionales, el diplomático afirmó que “están muy bien”, y tienen “un récord de seguridad muy alto; tenemos centrales que están operando desde hace más de 50 años sin problemas”.
También indicó que los próximos desafíos son la construcción de la cuarta central nuclear y continuar con “la extensión de vida, o sea la operación de largo plazo de Atucha 1”.
“Ese el paso siguiente después de haber completado exitosamente la extensión de la Central Nuclear Embalse”, concluyó Grossi.