Este jueves, se aprobó en el Senado, por unanimidad, la “Ley Vigo”, que exige a las obras sociales, prepagas y prestadores de salud proveer programas para la atención de la violencia de género, así, garantizar que la atención integral de las víctimas se realice con los parámetros y las indicaciones adecuadas.
La iniciativa había recibido media sanción en la Cámara baja en 2020 y fue impulsada por la senadora Alejandra Vigo (Córdoba Federal), cuando era diputada.
La misma incluye las terapias médicas, psicológicas, psiquiátricas, farmacológicas, quirúrgicas y toda otra atención que resulte necesaria.
Hoy, la asistencia integral de los tratamientos para las víctimas de violencia de género está incluida en la asistencia en sólo dos obras sociales: Ossacra (la Obra Social del Sindicato de Amas de Casa) que preside la propia Vigo y en el Apross, la obra social de la provincia de Córdoba.