El argentino fue prolijo, aceleró cada vez más con el correr de las vueltas y se mostró cómodo con el auto. Este sábado será la qualy.
El piloto de 21 años, hizo su debut a tiempo completo en el equipo Williams, dio sus primeros giros en Monza, Italia, y tuvo un gran día.
El que no esté muy metido en el automovilismo no entenderá por qué dos 17os puestos (1m22s880 y 1m21s784) en los entrenamientos pueden significar un gran día. Por empezar, Williams es la segunda estructura con menos puntos en el campeonato -cuatro, y está arriba de Sauber-. Y, por encima de todo, fue una de las primeras experiencias del pilarense en una máquina de este tipo (ya había participado en un rookie test y en otra FP1, en Silverstone).
En estas pruebas, en las que no importa tanto el tiempo final (se suelen aprovechar para ajustar reglajes, medir el desgaste de los neumáticos y demás), Colapinto superó a pilotos que vienen corriendo hace años y, fundamentalmente, giró por dos horas sin hacerle ni un rasguño al auto, siendo lo más heavy un paso por la leca que no pasó a mayores.
Este sábado deberá volver a los entrenamientos y, unas horas después (a las 11, más precisamente), medirse contra los otros 19 pilotos en una clasificación que se divide en tres secciones: Q1, en la que los cinco más lentos quedan eliminados; Q2, en la que otros cinco no pasan el corte, y la Q3, en la que los 10 más veloces se pelean por la pole position. Por último, el domingo, cuando sucederá eso que se lleva esperando por más de dos décadas: que un argentino ponga primera, suelte el embrague y se lance en una carrera de Fórmula 1.
Olé