¿Quién atenderá a las infancias y adolescencias?. Con esta interrogante inicia el documento elaborado por la Dirección de Docencia e Investigación del Hospital de Niños “Orlando Alassia”, de la ciudad de Santa Fe.
El informe ensaya algunas explicaciones para este fenómeno que ya empezó a tener sus efectos en algunos efectores de salud de la ciudad de Santa Fe pero que, como se dijo, se hizo público a nivel nacional.
Las condiciones laborales, la alta carga horaria, la cantidad de años que demanda la especialización y el pluriempleo, aparecen como algunas razones por las que Pediatría no figura como prioridad entre quienes estudian Medicina.
El primer dato que aporta la evaluación es que “en octubre de 2022 ingresaron a la Residencia de Pediatría del Hospital Alassia 6 residentes que cubrieron el 50% de las vacantes existentes”, una realidad institucional que “se inserta en el marco de una problemática global en nuestro país: reducción de aspirantes a formarse en pediatría, falta de pediatras para cubrir puestos estratégicos y proyección de un futuro que en el corto plazo mostrará fuertes debilidades en la atención de niñas, niños y adolescentes“.
Sin embargo, la falta de recurso humano no afecta sólo el servicio de Pediatría. También a “la mayor parte de las especialidades consideradas prioritarias tanto para la atención primaria de la salud como para los cuidados críticos que no lograron completar sus cupos“.
La formación en la residencia es muy dura: “se trabaja, por lo menos, ocho horas diarias, más dos guardias semanales. Se necesita soportar el estrés que implica la atención de niños graves o con enfermedades complejas. Además, tener que duplicar el esfuerzo durante epidemias y catástrofes. Muchos de días feriados y festivos, el médico residente, los pasa trabajando en el Hospital“.
Otro aspecto analizado es el tiempo que demanda la formación en Pediatría: son 6 años de carrera de Medicina, 3 ó 4 de la especialidad y entre 2 y 4 si se realiza una subespecialidad.
Frente a esta situación, el comité de docencia e investigación del Alassia elaboró una serie de propuestas de carácter inmediato, y de mediano y largo plazo. Entre las primeras se ubica una alianza estratégica con las Universidades para fortalecer los vínculos previos y generar oportunidades para el conocimiento de la Pediatría como especialidad.
A mediano plazo se plantea que el Estado priorice los cargos de Pediatría, que se promueva la ley de Concursos y la Carrera Profesional dentro del Sistema de Salud y aranceles diferenciales para quienes certifiquen y recertifiquen su especialidad tanto en el ámbito público como privado.
A largo plazo, el planteo es reducir la duración de la formación teórica de la Carrera de Medicina a cuatro años y sumar una cantidad similar de formación de postgrado en servicio como obligatoria. “La complejidad actual y los desafíos de la salud hacen que sea necesaria profundizar la formación no como una opción sino como parte del proceso de aprendizaje de los profesionales de la salud“, concluye el documento.
Fuente: El Litoral