Estudios recientes hallaron cuál es la rutina que puede acelerar el metabolismo y que permite que la persona pierda calorías no sólo durante la sesión sino incluso después, en otras actividades.
Con más de dos mil millones de personas con sobrepeso en todo el mundo, y las consecuencias para la salud que, se sabe, eso conlleva, pensar que existe una rutina de entrenamiento capaz de convertir el organismo en una “máquina” de quemar grasa, que podría ayudar, además, a prevenir el aumento de peso no deseado con el tiempo, suena alentador.
Es lo que promete el entrenamiento de intervalos de alta intensidad -o HIIT-, según descubrieron investigadores en un reciente estudio. En el trabajo, que se publicó en el British Journal of Sports Medicine, HIIT aumenta la quema de grasa más que el ejercicio aeróbico. Y sus beneficios serían mayores con el paso del tiempo.
Para el estudio, los investigadores combinaron los resultados de 18 ensayos de intervención controlados sobre los efectos del HIIT en la tasa de quema de grasa durante el ejercicio. Los cuales incluyeron un total de 511 participantes adultos que realizaban HIIT supervisado, ejercicio aeróbico de intensidad moderada o un grupo de control sin ejercicio.
La duración de las intervenciones de ejercicio varió de dos a 14 semanas. En casi todos los estudios, los participantes participaron en tres sesiones de HIIT por semana.
Después de 12 semanas de HIIT, se puede esperar que cada minuto de actividad física queme 0,13 gramos adicionales de grasa. Esto significa que para alguien que realiza 150 minutos de actividad física a la semana, esto podría resultar en alrededor de 10 kilos (22 libras) de grasa adicional quemada en diez años.
Como beneficio adicional, los autores del trabajo vieron que las personas con sobrepeso pueden esperar mayores aumentos en la quema de grasa, en comparación con quienes tiene un peso “normal”. Y frente al ejercicio aeróbico, la actividad que por excelencia es considerada de elección para quien necesita perder peso, los investigadores observaron que si bien ésta también podría mejorar el metabolismo de las grasas, esto requeriría un compromiso de tiempo mucho mayor y las mejoras no serían tan notorias.